viernes, noviembre 05, 2010

Esto no es más que vivir.


Una grieta

un leve resquicio de memoria

una trampa

el inocente mirar hacia atrás

un estallido que triza la memoria

el exhalo atorado por siglos

y el desbande lo que lo se creía olvidado.

Un palpitar absurdo

un suspiro anacrónico

una imagen desdibujada

la sensación de una nada colmada de todo

y la tarde que sigue su paso incólume.



Esto no es más que vivir.

domingo, octubre 24, 2010

Finalmente, las palabras entorpecen el decir.

Finalmente,
las palabras entorpecen el decir,
enturbian el epíteto de la verdad y cuajan,
entregadas,
con la paradoja irónica de lo transparente.
Finalmente,
las palabras forman su propio laberinto asfixiante,
que las ahorca y entumece,
que las muta y torna invisible su significado.
Finalmente,
las palabras no nos representan.
Se rebelan en cuanto salen disparadas de nuestra boca
y adquieren vida y consistencia propias.
Es su truco.
Nos hacen creer que llevarán el mensaje leal y fielmente,
pero en cuanto sienten la brisa sobre sí olvidan su promesa
y corren con semántica propia.
Quizás sea por la venganza de saberse dependientes de otro que las sueñe,
las idee, ordene y vomite.
Quizás por la inquina de saberse con una existencia inefable,
etérea y limbática como las emociones que las paren.
Tal vez por esto o aquello,
sin duda por lo aparente o lo evidente,
acaso por injusticia o falsa erudición,
lo cierto es que...
finalmente
las palabras entorpecen el decir.

domingo, octubre 03, 2010

La muerte me envidia.


La muerte me envidia
no se atreve conmigo
me trata como a una cebolla
con su mortecino y doloroso tentáculo
me saca piel por piel
pero no se atreve a mirarme a los ojos.

Sabe que no la temo
sabe que la invoco
sabe que la deseo con lujuria insana
sabe entonces que no soy su soldado ni esbirro.

Envidia mi atrevimiento
mi falta de pleitesía
mi rodilla no dispuesta a doblegarse ante su fatua carcajada.

Envidia mi amor hacia ella
porque no conoce ese afán
nadie antes que yo se lo ha prodigado
sólo sabe de su bárbara soledad.

Por eso me cerca
me amenaza con los nombres que me dan sentido
aun sabiendo que con ello no me doma
aun sabiendo que con ello
me cago en su supuesto poder.

Anda, atrévete conmigo
despliega tu veneno en mi cara
hazte hembra mirándome a los ojos
así, de frente, como yo te he llamado
sin pausas, sin eufemismos, sin refranes ni metáforas.

Jaja no sabes invocarme
se te atraganta mi nombre, oh poderoso y absoluta muerte
se te atraganta mi nombre.

Finalmente tu ausencia no es mi condena
sino la atadura que te ciñe a mí

Entonces, ¿quién pierde la batalla, puta asquerosa?


domingo, septiembre 26, 2010


Tengo una pena negra
pena de lágrima de rincón
de lloro silencioso y clandestino
de lengua muda y razón algo desconocida...aunque sólo algo.

Camino por sendas de seda asfixiantes
sueño con mi Wallis a media mañana
se me enreda ese dolor con este otro y con el mío propio
camino por sendas de ásperas sedas.

¿Dónde pongo esta pena?
¿Qué recipiente puede contenerla por un rato sólo para poder salir a respirar un poco?

lunes, septiembre 13, 2010

La vida es una puta veleidosa

Mi razón no pide piedad
se dispone a partir.

Borges dijo una vez que la vida se construye de momentos y,
por algo,
no incluyó las pausas.
La vida no tiene pausas.
Es demasiado perversa para concebir treguas.
Ella,
al igual que los niños,
cree que las sorpresas son siempre alegres.
Pero,
a diferencia de los infantes,
la vida sabe que sus sorpresas son demoledoramente trágicas,
hirientes,
decomunales e insanas.
La vida siente envidia de la calma,
de la armonía e incluso,
es envidiosa de la felicidad,
aunque sabe que ésta fue inventada,
como un artilugio,
para que ella fuera la reina,
la irrenunciable.

Por eso
no creo en la vida
porque no vale nada
porque es una puta veleidosa
porque se entrega al iluso
al idealista precario
al espejismo utópico
al que no tiene nada.

viernes, agosto 06, 2010


Los días me muerden la razón

y me desvisten con una lujuria apremiante

de poca ternura

nulo entendiemiento

y todo de contestación.


Nadie hoy clama por una pausa

palabra olvidada

gesto en extinción

preámbulo marchito

reemplazado

mutado

desechado por exceso de misericordia.


Un nuevo dios

un matriarcado esclavizante

la premura

la urgencia

y su amante lascivo

el apuro

lo inmediato.


Mientras tanto

yacemos atolondrados

asfixiados de tanto respirar

boquiabiertos de realidad

narcotizados de una consciencia etérea.


¿Hasta cuándo, digo yo?

¿Hasta cuándo cultivamos el afrecho que nos ahoga?

¿Hasta cuándo jugamos al borrego consciente de su fragilidad?

Hasta cuando la muerte nos separe de tanta soberbia.

Hasta cuando decidamos lo imposible.

Hasta cuando dejemos de creer en nosotros.

Hasta que dejemos de ser vacas sagradas de una creación fraudulenta.

viernes, julio 02, 2010


Te vas apagando de a poquito
un exhalo tras otro dejas una estela de cansancio y manos caídas
menos rabietas, menos brío en la palabra que siempre fue "fuerte y clara"
ahora gobierna el quejido
y las ganas de no seguir en un camino que ya se ha tornado gigante.

Yo pido que te lleve
y muerdo el ansia egoísta de querer saberte aquí
a este precio agónico
prefiero que tus ojos acuosos se apaguen en la oscuridad del descanso eterno.

Anda, Willis...no demores tu paz.

sábado, mayo 29, 2010

Preguntas retóricas


¿Por qué...
son tan difíciles los inviernos?
me convierto en el suelo al que van a parar las hojas suicidas?
ese tenue sol de otoño no penetra la membrana de mi alma?
me siento la fuente desde donde emana la lluvia?
la melancolía se viste con mi nombre y me deja desnuda al frío?
no puedo huir como lo hacen las nubes?

Permanezco estática
muda de gritos erizada
aterida del frío del silencio rotundo
aterrada en el desamparo de los márgenes
huérfana de alientos y ansias
una penitente del otoño
una sobreviviente en medio de hojas amarillas
caminando al arbitrio de huellas casi ciegas, casi inertes, casi nada.

¿Habrá...
alguna senda que me lleve más allá de mis venas?
una mañana sólo para nacer al amparo del sol?
un legado en donde reposar mis huesos mortecinos?
una mortalidad que me libere de atardeceres?
algún año sin otoños?
una vida completa sin despertar?
una brizna de magia al alcance de mis dedos?
algún día que no esté hecho de preguntas?

domingo, mayo 09, 2010

No me gustan las sorpresas.
Ese álito de invasión que desprenden me incomoda;
me es agresivo.
Esa algarabía que traen adheridas me huele a cortina de humo
que encubre algo un poco fatídico.
Me gustan los anuncios,
los preámbulos,
los rituales.
Creo que ellos no eximen de magia y encanto a las cosas,
ni las situaciones,
porque la alegría o el asombro no son patrimonio de la sorpresa.
¿Quedó claro?
NO ME GUSTAN LAS SORPRESAS.

viernes, abril 30, 2010

Profético

He aprendido a
reírme del frío de las mañanas
navegar entre la bruma y la niebla
enderezar mis turbulentos ánimos
llenar de pausas los silencios de mis entrañas.

Voy caminando hacia
el reencuentro de los perfiles mojados
la ventana que ya no atrapa ni confunde
la vena perpetua de compases luciferinos
el conjuro universal que define mi morada.

Aún me falta llegar
al barandal de mis pensamientos fatuos
a la corriente invisible de mis celadores lamentos
al corredor ruinoso del regreso demorado
a mi trémulo diapasón atolondrado.

Hoy sé que no es urgente llegar.
Hoy sé que un paso convoca inusitados parajes.
Hoy sé que lo raudo empaña los segundos y que son estos los anfitriones de los días.

Hoy sé que es probable que nunca llegue a tocar la cima de mis sueños, pero mientras estén allí, mirándome desde su olímpica envergadura, tendré un camino que recorrer.



viernes, abril 09, 2010


Tus palabras hacen huir tu mirada

hacen que tus transparentes ojos vayan a alumbrar otros planetas

porque albergan el sol

un sol que no puede decirse en voz alta

de tanto que quema mi garganta maniatada.


Pero tu alma se escapa por tus verbos titubeantes

y va torpemente a guarecerse en mis oídos.

Porque sé que eso es lo que quieres

refugiarte en mí.


Aquí estoy.

lunes, febrero 15, 2010

San Valentín


Una refriega de muslos
el croar de rodillas parlantes
el deseo hecho pelos y señales
ombligos que se narran fantasías
pechos que ebullen como magma
sexos antropofágicos
la piel impúdica desatando marejadas
fauces atómicas profiriendo herejías
manos acechantes en contienda impenitente
pies horadando sábanas
la pelvis en desenfrenado vaivén
un sismo de carne y médula
el esqueleto hecho cascabel
calor de mazmorra húmeda
olor a fosa común
dientes desparramados en sangre
un orgasmo contreñido, estítico y esquivo.

Se acabó el show
el telón baja
los actores corren a sus camerinos
otra función en 30 minutos

Intermedio musical
un café con malicia, un cigarrillo alegre.

Todos de vuelta a sus puestos...

Una refriega de muslos
el croar de rodillas parlantes
...
...
por los siglos de los siglos

Amén.

sábado, febrero 06, 2010

Cambio

¡¡¡ Qué difícil son los cambios !!!

La piel va cayendo por el ruedo del alma.
Las escamas del pasado pesan al desprenderse y arrastran con ellas algo de carne viva.
La mente se expande tratando de no olvidar cuáles son los pasos siguientes.
El agotamiento invade los rincones más ocultos y, junto a la ansiedad, salen a recorrer los valles desiertos de ideas.
El sueño no llega y el insomnio se toma las horas con una lluvia de mosaicos fantasmales.
Este debe ser el camino que debe hacerse antes de comenzar a disfrutar de lo nuevo. De seguro son las horas previas al parto de uno mismo.
Ya llegarán los momentos de la tan ansiada quietud, de la calma, el silencio y el bienestar.
Ya llegarán.