Me llegan los 42 y enmudezco frente a ellos.
viernes, noviembre 30, 2007
miércoles, noviembre 28, 2007
Las razones
las ilusiones
los preámbulos
cuelgan polvorientos
exagües
ya no piden agua ni contemplación
menos, tiempo
Me sumo a ellos
(hace rato que dejé de pedir clemencia)
Las cartas están sepia en la mesa
las lecciones ya parecen letanía de vieja con encajes en la cabeza
¡¡¡¡Listo!!!!
Ya no basta con desear!!!!
las ilusiones
los preámbulos
cuelgan polvorientos
exagües
ya no piden agua ni contemplación
menos, tiempo
Me sumo a ellos
(hace rato que dejé de pedir clemencia)
Las cartas están sepia en la mesa
las lecciones ya parecen letanía de vieja con encajes en la cabeza
¡¡¡¡Listo!!!!
Ya no basta con desear!!!!
domingo, noviembre 18, 2007
viernes, noviembre 16, 2007
Una disfunción cerebral no hace el delirio
no anida la pasión
ni el heroísmo...
tampoco mueve a idealismos
ni hace brotar los puentes de la imaginería.
Entonces
¿a qué temerle?
¿por qué esconder la cabeza, bajar la vista, avergonzarse?
Bueno, por el estigma
por la posesión demoniaca que se le supuso alguna vez
por la espuma en la boca
y los nervios hechos sal.
¿Para qué seguir?
Pudiera ser que el esfuerzo deviniera en crisis.
no anida la pasión
ni el heroísmo...
tampoco mueve a idealismos
ni hace brotar los puentes de la imaginería.
Entonces
¿a qué temerle?
¿por qué esconder la cabeza, bajar la vista, avergonzarse?
Bueno, por el estigma
por la posesión demoniaca que se le supuso alguna vez
por la espuma en la boca
y los nervios hechos sal.
¿Para qué seguir?
Pudiera ser que el esfuerzo deviniera en crisis.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)