martes, octubre 31, 2006

Mientras tanto...

me cubro de cenizas
despierto por la noche pateando fantasmas
me intoxico la mirada
hurgueteo mi clítoris inocente
derramo una lágrima en el paradero
coagulo un garabato a la suerte negra
ansío unos brazos
leo La broma de Kundera
respiro el smog de mi ventana
paseo mi mal genio
deposito algo más que una letra aquí
mascullo una soledad petrificada
le robo una historia al transeúnte de todos los días
me visto de café franciscano
me depilo las ilusiones
tirito de frío en primavera
pago las cuentas atrasadas
me voy de pie en la micro
enderezo mi almohada
me canto una canción infantil
asalto las liquidaciones
endurezco mis abdominales
escribo mensajes de texto
deformo mis zapatos
reprimo un grito de auxilio
aliso mi pelo
me como las uñas
escucho el Requiem de Mozart
corrijo con lápiz rojo
me tomo tres tazas de café por la mañana
esquivo los noticiarios centrales
duermo con la mandíbula apretada
fumo en la oscuridad de mi pieza
añoro vacaciones de mí misma
me aguanto las ganas de ir al baño
respondo una estupidez
rezo un Padrenuestro mientras me duermo
sigo el vuelo de una mosca...

mientras tanto...llega la calma.

sábado, octubre 28, 2006

¿Prender o Encender? Ésa es la pregunta...

Podrás
Retarme
Eternamente por
No saber usarla
Debidamente pero
Entiende mi humilde
Rebeldía

v/s

Enséñame y
Nunca
Creas que
Eres menor que yo porque
No sabes cuánto
Daría por
Escribir tus
Relatos

viernes, octubre 27, 2006

Autorretrato Parte I...


Mis curvas no son peligrosas
(nadie se ha estrellado contra ellas)
tampoco hay animitas en mi cintura
(aunque le prendo velitas a un par de topones para que me hagan el milagrito de volver)
y aunque todo cae por su propio peso
(gravedad mediante)
el proyecto de remodelación humana está
(en pleno proceso de activación)
el asfalto ya está agrietado
(fatiga de material)
las vías de acceso tienen sus baches
(como lomos de toro embriagado en cerveza)
lo que era turgente se ha vuelto menguante
la señalética blanca de las sienes
ha adoptado colores de última generación...

Continuará

Boleta tardía...

Llegó del pasado un amigo al cual dejé de frecuentar a los 15 años y apareció con una andanada de recuerdos de aquellos días.
Mi cara iba transformándose desde el asombro a la suspicacia. Nada me era familiar de todo lo que él decía.
Su cara, en cambio, iba de la suspicacia al enojo por lo que llamó "mi falta total de apego a los recuerdos y su gente".
Acto seguido, un sermón de aquellos, donde las palabras "raíces" e "identidad" se repetían hasta el hartazgo. No medió mucho tiempo hasta que mi enojo fuera patente.
¿Quién, si no uno mismo, filtra y graba las imágenes del pasado?
Como una vieja encolerizada, me reprendía e instaba a que exprimiera mis ya agotadas neuronas en función de nombres y caras que "yo debía tener presente porque uno es hoy lo que fue ayer" TOMA!!!!!.
Conclusión: soy una desarraigada que probablemente padece esta inestabilidad emocional producto de que mi memoria es un saco roto, que olvida lo que ha vivido.
Luego de su reprimenda bociferante se fue ofuscado y sin ganas de volverme a ver.
Con esa decisión tan drástica sólo consiguió no enterarse jamás que acabo de olvidarlo a él también.
¡¡¡¡Nadie me viene con guevás!!!!

miércoles, octubre 25, 2006

Disgresiones subterráneas...

Metro. Una mujer a mi lado con un ramo de rosas rojas y amarillas. Yo pienso que ni cagando me paseo por Santiago con flores ¡¡¡¡me da vergüenza!!!! Me han regalado flores para el Día del Profe y otras efemérides, pero siempre terminan en un envase de Coca Cola desechable en mi escritorio y, en cuanto se secan, las cobijo en algún libro para recordar el momento (son menos ostentosas cuando están secas...como los humanos, supongo)...Esta línea no va al Cementerio, por lo tanto son flores de regalo para un vivo. Miro para otro lado. Recuerdo que recién me catalogaron de "regia, melosa y bonita"...Me escruto en el vidrio-espejo y pienso que más me hubiera calzado "inteligente y creativa". Una sonrisa sardónica se dibuja en mi cara (no me molesta del todo la descripción, debo decirlo), pero me suena a otra persona...Vuelvo a mirar para otro lado. Un tipo con cara de inteligente y creativo me mira. Penetro en su mente e imagino lo que piensa...me calibro a partir de su expresión: ¿regia, atractiva o definitivamente inteligente?...Fantaseo con lo que pudiera estar pensando de mí... Un escote que no es dadivoso, pero algo entrega; caderas de un mes de gym; ciertas arruguillas que se disimulan con los rizos aclarados a la fuerza en una sesión de blondon...Me gusto, claro, no es mala la estampa, pero....será lo mismo que está diciéndose el susodicho?...Recuerdo de donde vengo: acompañar a un amigo de saber que su madre tiene un cáncer de regreso, luego que un milagro lo había extirpado...Me siento una mierda al estar midiéndome con esas varas tan requetecontra frívolas, mientras él debe estar poniendo la cara frente a su familia como el poseedor de esta macabra noticia...No quiero pensar en enfermedad, aunque también fantaseo, a veces, con una terrible, que hace temblar a mis enemigos...Desecho el tema (hoy no quiero hacerlos padecer mi ausencia).
Cambio de vía. Hombres y mujeres que, de tan cansados, no están para fantasías...Pienso en la cerveza que me tomaré en cuanto pise mi depto y haya prendido el computador para vomitar esto. Las calorías de más no están dentro de mis preocupaciones en el momento. Ni tampoco la clase que me perdí de acuaeróbica...luego veremos la carga adiposa que mi devaneo ocasionó...No es tema por el momento.
Ahora ya me bajé del metro...ya no caben las fantasías...hay que producir...me tintinea el computador para resolver las dudas de mis alumnos.
Creo que los profes trabajamos más horas de las que dicen en la TV...¿Será cierto o sólo es un arranque febril en medio de estas disgresiones de subterráneo?

sábado, octubre 21, 2006

He paseado mi humanidad noctámbula por el Santiago etílico de noche de viernes; como queriendo asir algo que ni siquiera sé qué es....cunetas bañadas de esperma anhelante en busca de asidero; un Parque Forestal inseminado de parejas arañándose un destino inefable y la Plaza de Armas teñida de suspiro limeño vestido de puta inmigrante.
Yo en un taxi de vuelta de un margarita que me despertó el ojo avisor de realidad ( la mía y la de tantos) y que, al final, me deja un sabor de realismo que no alcanza para el mágico de García Márquez porque la mixtura de brutalidad y decadencia te golpea la mirada y te deja en estado de compasión.
Es mi ciudad, mi cementerio de identidad y mi sementario de identidad también.

miércoles, octubre 18, 2006

Distancias...

Tu letra llegó primero en un viaje de muchas leguas y se depositó en mi letra. Ambas se descubrieron. Venían de las entrañas de sus dueños. Querían taladrar tímpanos y retinas; hablaban un lenguaje hermano y compartían carencias. Eran los escudos de dos almas errantes.
Luego vinieron las caras, con el mundo en sus ojos, con la verdad en las sienes y con olor a búsqueda y encuentro.
A ellas se les sumaron las voces que acortaron las distancias, que se acariciaron, comulgaron e hicieron surco en la memoria.
Nos bautizamos, nos dimos la bienvenida y emprendimos el camino del compartir anhelos, temores, culpas y cicatrices. El tiempo se hizo a un lado cuando aprendimos a tomarnos las manos por sobre las latitudes, habíamos superado el primer encuentro.
Paso a paso nos fuimos metiendo en el paisaje y alimentando la necesidad de la presencia, de saberse, de estirar los dichos, las despedidas.
Remontamos las historias de cada uno, nos lamemos las heridas, envidiamos los dones, desmenuzamos la creación, arreglamos el mundo y comenzamos a ansiarnos.
La distancia nos hace ver espejismos, la hora del encuentro, el abrazo, la palabra primera y el beso último.
Una vida nos ha pasado por el lado, nos empuja con su brisa, nos apura con su ímpetu, nos coloca en el andén.
Ignoramos el resto de la historia; somos nuestros propios personajes, nadie nos narra, aunque tal vez alguien sueñe nuestros amaneceres.
Unas palabras nos hemos musitado de aquel gran mensaje que nos ha llevado a uno frente al otro.
Las casualidades no existen. Llega el minuto de saber qué hacemos mirándonos desde lejos; qué es aquello que debemos decirnos; por qué nos ha convocado la vida.

martes, octubre 17, 2006

De tanto buscarte, tu silueta se ha deshecho en mis ojos, aunque a tientas sigo tus pasos en esta distancia que a ratos atormenta.
Te cuelas por esa rendija que nunca logró cicatrizar, por donde se escapan los suspiros, los sueños, las ganas de encontrarte
y quedo allí, inmóvil en la espera,
como aquellas tardes de ventanas en que el sólo deseo te dibujaba viniendo hacia mí.
La ciudad te esconde las pisadas;
las calles nos expulsan hacia nortes distintos;
los paisajes comunes ya se han desteñido,
el cuaderno con tus dibujos y mis letras yace senil, mudo y sepia.
No hay rito que despegue mis manos de tu espalda;
no se ha escrito el nombre que derrame olvido sobre el tuyo;
no gira el tiempo si no es en tu dirección...
Pero irremediablemente te has ido,
aunque no de mis vértebras...

miércoles, octubre 11, 2006

Plegaria...

Se disipa la niebla
ya no hay escaramuzas posibles
los pecados yacen en carne viva
la noche cae a borbotones
se entierran las uñas en la sangre
y el alarido son las campanadas de la iglesia
salen despavoridos los soles
la luz torna febriles los pensamientos
cuerpos confusos se atropellan
se rozan, se embisten, copulan
el caos arrecia las mamparas
un cortejo fúnebre desarma las veredas
un olor almibarado recorre los techos
la brisa se disfraza de invisible
un halo funesto emerge de las lenguas
es el sino que presagia tormentas
octubre rojo negro tornasol
la parálisis de los miembros
una condena indeseable
el reloj destripado de la memoria
un rayo que detona luciérnagas opacas
el final anunciado
un acto irredimible
el parto descifrado
bocas cosidas en el fermento del espanto
algo se viene irremediable
se acerca, se yergue, conmueve
una bienvenida de crespones negros
aliento sulferino
las piedras palpitan plegarias
ojos desorbitados atisban el horizonte
ya está aquí
ineludible
corpórea
inmutable
la patrona de los insomnes
anfitriona de alucinaciones
néctar del abandono
nuestra señora la Locura
¡Ruega por nosotros
tus seguidores
ahora y en la hora de la Cordura!
¡SALUD!

Hay que estar preparado para lo inesperado...


Ayer estuve rodeada de muertes
me entraron por los ojos
me abordaron las ideas
me zarandearon la vigilia
y se fueron en la madrugada.

No eran mis muertos
(esos no me visitan hace mucho)
eran de otras legiones
pero recalaron en mí
como náufragos del tiempo.

Algo querían decirme
oí sus murmullos
algo dejaron dentro
para encontrarlo y descifrarlo
(me siento preñada de ese algo).

Dónde buscar no sé
qué voy a hallar lo desconozco
sólo siento un rumor dentro mío
uno ajeno a mis susurros
uno que me anida desde dentro.

A ratos lo siento en mis oídos
otras se desplaza por mi piel
o me tensa la lengua
o me humedece las manos
deambula, gira, se esconde, emerge.

Ayer me visitaron unos muertos
para hablarme de ...

sábado, octubre 07, 2006

Girando en gerundio...

Una refriega de muslos
el croar de rodillas parlantes
el deseo hecho pelos y señales
ombligos que se narran fantasías
pechos que ebullen como magma
sexos antropofágicos
la piel impúdica desatando marejadas
fauces atómicas profiriendo herejías
manos acechantes en contienda impenitente
pies horadando sábanas
la pelvis en desenfrenado vaivén
un sismo de carne y médula
el esqueleto hecho cascabel
calor de mazmorra húmeda
olor a fosa común
dientes deparramados en sangre
un orgasmo contreñido, estítico y esquivo.

Se acabó el show
el telón baja
los actores corren a sus camerinos
otra función en 30 minutos
intermedio musical
un café con malicia y un cigarro alegre.

Todos de vuelta a sus puestos.

Una refriega de muslos
el croar de rodillas parlantes
...
...
por los siglos de los siglos
AMÉN

Callando...cayendo

Párpados pesados
la mente llena de grillos incandescentes
la lengua cosida al paladar
no hay palabras en el estuche.

Un hoyo en la memoria
estampida de imágenes
un yo fosilizado en el presente
ilusiones perturbadas en la niebla.

Gritos disfónicos
uñas carcomidas de cotidiano
y el respirar de un gigante abatido.
Es la despedida.

El garabateo de horas trágicas
un clamor de auxilio solapado
un reloj que aprieta inmisericorde
penas enquistadas en la médula.

Manos aferradas a la cordura
elástico que anuncia quiebre
la hebra umbilical agusanada
el desplome de peldaños.

¿Dónde habrá un huracán de brisa?

domingo, octubre 01, 2006

Retorno
has venido a visitarme
vestido de fantasma
has dormido a mi lado
pero ausente.

Repaso
nuestra historia
los vínculos
las promesas
tu mirada trizada
mi exultante amor de antaño
mi insufrible nostalgia de hoy.

Quiero
verte de lejos
oir tu voz sonando dentro mío
tus manos acariciándome la espalda
y hacer desaparecer este lapsus
que nos separó.