miércoles, mayo 21, 2008

Amenaza...


Me pedirás clemencia por los poros
cuando te vomite a Bertoni en las estrías
cuando despache a un Baudelaire cargado de vino
en la humedad de una sábana matutina...

No querrás saber del sol cuando Rimbau se descubra en tus oídos
y de Rohka prosiga su encantamiento
ni siquiera podrás pronunciar un Canto General
sin pensar en el génesis de la savia y el hombre...

Y en medio de todo
tú y yo coludidos
haciéndole honor a la palabra
profiriendo versos al aire
en un territorio liberado
lejos del tumulto y la herejía
distante del prejuicio y la mala palabra
cultivando el amor que nos debemos
haciendo carne la distancia señalada
y germinando mariposas amarilla
en estómagos desnudos y asezantes.

Tenemos una cita con la poesía
el vino
la conversa
el amor atragantado
la caricia firme.

Tenemos una cita pendiente.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

así me gusta amiga.

Gonzalo Villar Bordones dijo...

eso es cobrar la palabra.

besos.