miércoles, septiembre 17, 2008

Llegó el momento que jamás imaginé

Nunca imaginé que algún día quisiera proponerme olvidarte
eso no estaba en mis anales,
ni en mi biografía,
ni en mi insana geografía
pero debo abandonar la tozuda idea de bailar con tu sombra
debo exortizarte de mis sueños de adolescente paupérrima
y dejarte ir
Aún no sé dónde poner tanta tristeza
ni qué hacer con este vacío inmenso que vomita mi necesidad de ti
pero no puedo seguir conjurando al asfalto para que te traiga de vuelta
Las calles ya no oyen mi reclamo
y en mis venas sé que debo dejarte partir
Me dueles en el recóndito exhalo de mi humanidad lacerada
y al mismo tiempo
eres la promesa de amor que mis sentidos conjuraron

Pero debo dejarte ir
para que las mañanas se susciten en mi vida

De verdad os digo:

NO SÉ DÓNDE PONER TANTA TRISTEZA.

1 comentario:

Víctor Hugo dijo...

mmmm a veces el olvido es largo.... y doloroso... pero debe ser superado pues esta vida merece ser vivida... con sus dolores y alegrías...y mas de alguien debe necesitarte no

saludos!
VH