lunes, septiembre 18, 2006

Grito...


¿Cuántas veces quieres que te diga mi nombre, abuela?
No puedo con tu ir de memoria
y con tu sordera porfiada.
No puedo con tu lento recordar
y esa hilvanada certera de los años tan remotos.

Te olvidas de mí
aunque me tienes al frente;
me enseñaste a leer
y a gustar de los helados;
me hablaste de prejuicios
y de la memoria de la historia...
y ahora ya no me reconoces.

Los tiempos son crueles contigo, abuela,
te tienen atrapada en un presente
que tú ya has dejado ir
porque te parece ajeno y extraño.

Tu piel ha cuajado en huesos frágiles
y tu andar altanero de antaño
se fue en los recodos del día.


Pareces un ave asustada
encorvada en los pliegues del tiempo.
Le hablas al aire cuando nadie te ve
pidiendo a gritos una partida que no llega.

Ya no hay estridencia en tu voz
como cuando me retabas de niña.
Ya todo se ha ido de ti
hasta mi nombre.

¿Cómo decirte estas palabras, abuela, para que luego no las olvides?

Los tiempos son crueles contigo, abuela,
y a veces también nosotros.

Seguramente cuando llegue el momento
no te diré nada
me convertiré en muro de piedra recia
o huiré del espanto de dejarte ir;
me diré que estarás mejor
allá donde no hay calendarios
y reviviré las tardes de mi infancia
cuando me abrías el mundo de los libros,
tu secreto mejor guardado,
tu legado.

Ya de nuevo me olvidas, abuela
y preguntas quién soy
¿Cómo decirte que no soy nada
si ya olvidaste mi nombre,
los libros,
los helados,
las tardes,
mi infancia,
los prejuicios,
la historia,
si ya olvidaste recordar
¿Qué queda, entonces, abuela?

Queda mi amor mudo
y el nudo en la garganta.

1 comentario:

dreamparanoid dijo...

.. Yo le decía a mi abuela ayer "mejor que olvide, es como recomenzar cada día". Así se van desligando de las raices, y se vuelven libre en el tiempo... como el polen.

(muchas veces dan alergia)

Llegado el momento me pregunto para que acumulo tanto recuerdos, si luego el bolso se romperá y los recuerdos quedarán esparcidos en las calles....

Luego me da lo mismo... y sigo viviendo

Espero que, si llego a viejo, no olvide quién me abrió los libros, y quién le dio tinta a mis plumas...

Besos...

Tq

PD. estamos felices que estes de vuelta, ale...

jjeje